La abogacía preventiva promueve la buena salud jurídica.
La abogacía preventiva consiste en anticiparse a una situación que aún no ha surgido, informándose y planificando con un profesional para evitar situaciones no deseadas o para minimizar las consecuencias de un conflicto habiendo previsto su resolución en caso de que surja. Se trata de tener un enfoque preventivo y proactivo orientado a la evitación de conflictos futuros.
En el ámbito empresarial esta prevención es muy clara, pero en el espacio de la familia es también muy importante y nos reportará grandes beneficios, suponiendo un ahorro de tiempo, de dinero y especialmente una reducción del desgaste emocional y psicológico.
En el despacho podemos ofrecerte este asesoramiento preventivo mediante la elaboración de distintos protocolos familiares:
- Testamentos
- Poderes preventivos
- Voluntad vital anticipada
- Capitulaciones matrimoniales
- Pactos prenupciales
- Redacción de pactos en previsión de ruptura
- Elección del régimen económico matrimonial
Recuerda que todo lo que no esté previamente acordado y por escrito generará discusión.